
La presencia de fragmentos articulares es una razón frecuente de cirugía artroscópica en caballos. La etiología de los fragmentos es variada, y se clasifica en dos grandes grupos generales: enfermedades desarrollo del sistema musculoesquelético y procesos traumáticos.
Los fragmentos resultantes de las patologías del desarrollo del sistema musculoesquelético son comúnmente llamados osteocondritis disecante (OCD). Estos fragmentos son consecuencia de un fallo en la osificación endocondral del hueso subcondral. El proceso normal de transición de cartílago a hueso subcondral no se completa de forma normal, lo que lleva a la persistencia de áreas de cartílago subcondral que no se mineraliza en su totalidad. Esto da lugar a presencia de zonas biomecánicamente débiles que llevan a la formación de fragmentos osteocondrales. En la mayor parte de los casos, los fragmentos OCD se presentan sin sintomatología asociada o con sintomatología leve. De hecho, es relativamente frecuente encontrar fragmentos OCD como hallazgos incidentales en estudios radiográficos, como, por ejemplo, el examen precompra. En otras ocasiones, la presencia de fragmentos articulares puede estar asociada a signos clínicos como distensión sinovial articular. En muchas ocasiones, el desarrollo de distensión sinovial está relacionado con el comienzo de la actividad deportiva del animal. En ese momento, el movimiento articular causa el levantamiento o separación de la zona afectada, y la formación de un fragmento. Esto es fuente de irritación articular, inflamación leve y formación de líquido sinovial excesivo y la consecuente distensión articular.
Los fragmentos OCD se suelen localizar en áreas de superficie articular de deslizamiento, y no en áreas de transferencia de peso corporal. De tal manera, que la presencia de estos fragmentos no suele estar asociada con dolor y cojera. La extirpación quirúrgica de fragmentos OCD es común y las razones incluyen prevención de distensión o degeneración articular, y razones económicas en precompra o poscompra del animal. En aquellas ocasiones cuando la presencia de fragmentos OCD está asociada con signos de claudicación, la resección quirúrgica se categoriza como terapéutica.
La otra categoría de fragmentos articulares son los que se presentan en consecuencia a procesos traumáticos y no asociados con fallos en la osificación endocondral. En esos casos, el proceso traumático suele estar asociado con un grado variable de inflamación y signos clínicos de claudicación. La fijación interna de los fragmentos o la resección quirúrgica de ellos son los tratamientos de elección.