34th Annual Scientific Meeting proceedings

Para el veterinario clínico equino la medicación intrarticular supone una importante franja de la actividad profesional, con un considerable impacto en su facturación. Hasta hace una década la selección de tipos de terapias intrarticulares se restringían a antinflamatorios corticoides y el viscoelástico hialuronato sódico.

La elección de la terapia intrarticular más apropiada se debe basar en un diagnóstico clínico y por la imagen lo más completo posible. El diagnóstico clínico debe incorporar la anestesia intrarticular, y el de imagen debería de incorporar modalidades adicionales al estudio radiográfico, poco sensible con artropatía de tejidos blandos o poco avanzada, 

En la actualidad el clínico tiene a su disposición las siguientes familias de terapias:

• Antinflamatorios corticoides: metilprednisolona, triamcinolona, betametasona, flumetasona e isoflupredona.
• Viscoelásticos: hialuronato sódico y gel de poliacrilamida.
• Ortobiológicos autólogos, incluyendo concentrado de factores de crecimiento (PRPs), solución de proteínas autólogas (Pro-Stride, APS), macroglobulinas α2, e IRAP.
• Células madre: con las dos familias, las células madres mesenquimales moduladas para la formación de cartílago articular (ArtiCel Forte, Boehringher E.) y las células madre derivadas de tejido umbilical (Horstem, Equicord).

Si bien los corticoides se mantienen como el tipo de terapia más utilizada, el clínico tiene a su alcance una variedad de terapias que permiten aliviar el dolor y la limitación deportiva, y ser regeneradores y condroprotectores. Elegir un tipo u otro de terapia se debe hacer basados en un diagnóstico por la imagen adecuado, idealmente que incluya resonancia magnética o artrografía con TAC, para el estudio más adecuado de la posible erosión del cartílago.